Después de tener tres aguacates en el refrigerador por dos semanas y dentro de un cajón por unos 4 o 5 días, estos seguían duros como una piedra. Ante la urgente necesidad de untar un poco de esta fruta en una de las cubiertas de un por demás delicioso sandwich de jamón con queso,recordé un antiguo consejo que en alguna ocasión una dama de la sociedad cajemense me diera mientras buscaba entre los rocosos aguacates del Wal Mart de Obregón, algunos que permitieran preparar un guacamolito para acompañar unos tacos de asada:
"Ay mijito, pues los calientas en el microwin y en un ratito se ablandan"
Antes de continuar, tengo que aclarar que el "microwin" es obviamente el horno de microondas. Supongo que en algún dialecto antiguo de la Europa Escandinava, esa debe ser la pronunciación correcta de "microwave".
La cuestión es que corté una rebanada de aguacate y decidí poner a prueba ese consejo, después de más de una década de haberlo recibido. El aguacate por supuesto que se ablandó y lo pude untar en el pan. El sabor le cambia un poco aunque no sabe malo. Entonces recordé haber leído o escuchado que no se debía calentar un aguacate :s
Me terminé el sandwich y le pedí a Google que por favor me investigara en Internet si alguien me podía sacar de esta duda. Ahora se que los aguacates no son tan grasosos como parecen, al menos no en grasas malas, que no tienen colesterol, y que las proteínas que proporcionan no son dañinas al organismo como pueden resultar las de origen animal. Aparentemente pueden calentarse, pero no por mucho tiempo. De hecho encontré varias recetas que los utilizan. Y el dato oscuro que andaba buscando, pues aparentemente si las proteínas de origen vegetal se calientan por mucho tiempo, también pueden resultar dañinas. Conclusión, a seguirlos madurando dentro de un cajón y preferentemente envueltos en papel.
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