Hace cerca de 3 meses que la publicación número 100 de este blog ha estado parcialmente escrita y no me había decidido a publicarla porque sentía que no estaba lista. Hoy la borré completa. Las cosas cambiaron súbitamente, cambiando lo que estaba siendo un fin de semana muy divertido y relajado en 60 segundos de tensión y ya más de 24 horas de sobresaltos constantes.
Tanto se nos ha dicho que un temblor fuerte podría presentarse en Mexicali, en cualquier momento, que llega en el momento que menos lo esperamos. Después de lo que ha pasado en otros lugares en lo que va de este año, ya no se si decir que esto era de esperarse o no. Y es que realmente no se sabe que esperar, ya que mientras escribo estas líneas se han sentido al menos 3 réplicas más.
¿Qué hacer en ese momento? Quisiera que hubiera una receta que funcionara todo el tiempo, pero lamentablemente eso es imposible. Todas las recomendaciones que se nos dan no aplican cuando estás en el lugar preciso en el que te recomiendan no estar: a la mitad de las escaleras de tu casa, con una ventana de un lado y un cuadro del otro, con tu familia en la planta alta y sin poder decidirte a dar un paso en ninguna dirección.
Vivimos en zona sísmica y mientras nos siga gustando vivir aquí tendremos que aprender a convivir con estos fenómenos. Ya sean de 5, 6 o 7.2 grados, hay que afrontarlos y estar listos en cada momento. La vida sigue y este blog sigue funcionando. Lento, con publicaciones aisladas, pero vivos y publicando.